Érase una vez una señora que se llamaba Pepa, que estaba embarazada de ocho meses.Tenía mucha sed, porque hacía mucho calor, entonces se equivocó con tantas
nauseas que tenía y...¡bebió aguarrás! en vez de agua, entonces fue directo al feto, y cuando nació era diferente por eso se llama "Aguarrás".
"Aguarrás" era muy famoso en su pueblo Adrilandia por su nombre "Aguarrás" tenía un amigo llamado "Juanito", era policia secreto, no es que fuera muy hábil, pero era un gran policia. Le encantaban las rosquillas, el café y que todo el mundo dijera lo bueno que era, pero ante todo era el mejor amigo de Aguarrás.
Un día estaba Aguarrás dando un paseo por el pueblo y vio a unos ladrones que iban a robar un banco, se escondió detrás de un coche y con su móvil llamó a su amigo Juanito, tuvo mucha suerte porque estaba en un bar cerca de allí comiendose unas rosquillas que le gustaban mucho, y solo tardo dos minutos en llegar y así pudo detener a los ladrones. Le contó a todo el mundo que le había avisado Aguarrás y la gente le empezó a respetar y ya no se metían tanto con él. En el colegio donde iba le dieron un aplauso muy grande cuando llegó.
Cuando llegó a su casa le dijo a sus padres que de mayor quería ser policia, porque la gente se ponía muy contenta cuando la ayudabas y empezó a estudiar mucho.
Un día, cuando fue mayor, Aguarrás fue un gran policia y le quería todo el mundo, además le enseñó todo lo que sabía a su gran amigo Juanito, que ya era el jefe de policia de ADRILANDIA.
Un día, Juanito, se murió de un gran atracón de rosquillas, entonces nombraron jefe de policia a Aguarrás y ordenó que construyeran una placa enforma de rosquilla para Juanito por todos los ladrones que había detenido y en cuya placa pusiera:
"Para el mejor policia
que pudo existir de
parte de Adrilandia"
La moraleja de esta historia es que no hay que insultar a nadie por su nombre porque luego te puede salvar la vida.
Escrito por Cuchiflín
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soi el mjor capchau
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